Según su mirada, Biden debería considerar el enfoque más flexible de Powell hacia la regulación financiera, su renuencia a incorporar los problemas relacionados con el clima en la supervisión bancaria de la Fed,. De esta manera, el estadounidense cree que podría verificar su “instinto” sobre si Powell estaría comprometido con el pleno empleo si la inflación sigue siendo más fuerte de lo esperado.
Por otra parte, el economista consideró que Lael Brainard -gobernadora de la Fed- es la “única candidata obvia” que tomaría una postura regulatoria fuerte, generaría mayor presión sobre los riesgos climáticos y toleraría un mayor riesgo de inflación para producir más trabajo.
Mientras el mandato de cuatro años de Powell finaliza en febrero, algunos partidarios del gobierno han argumentado que debería obtener un segundo periodo para completar un cambio de política que dé más peso al impulso del empleo. Sin embargo, cualquier cambio podría desencadenar una dura lucha por la confirmación en el Senado de Estados Unidos, dividido a partes iguales entre demócratas y republicanos.
Por último, Stiglitz declaró que fue un error la reelección que hizo el expresidente Bill Clinton del entonces presidente de la Fed y republicano Alan Greenspan: promovió la estabilidad y el bipartidismo, pero dejó que la fe de Greenspan en los mercados y un enfoque más intervencionista de la regulación preparasen el escenario para la burbuja bursátil de Internet y la posterior y grave caída del mercado inmobiliario.
“Nadie quiere perturbar los mercados financieros, hay un atractivo político en no mover el bote. Pero en mi opinión, cometimos un gran error al volver a nombrar a Greenspan (…), espero que Biden no haga lo mismo”, cerró.