Fiel a su estilo picante, el economista Carlos Melconian aseguró este sábado que lo que viene pasando en los últimos días, con el Banco Central vendiendo US$ 500 millones en lo que va del mes para controlar el tipo de cambio, no tiene que ver con las PASO de este domingo (como sugieren algunos analistas), sino con la falta de un plan y que, así como están las cosas, el mercado cambiario “es insostenible de acá a noviembre”.

“Tengo la impresión de que hubo una subestimación de la previa (de las elecciones). A lo largo de todo el año la pregunta clave fue el día después y qué viene. Y nosotros siempre intentamos decir que había que llegar a la elección. Por definición, siempre se llega, pero la pregunta es cómo”, aseguró en charla con el programa Sábado Tempranísimo, por radio Mitre.

“El mercado cambiario y la venta de dólares para sostener los mercados paralelos a lo largo de todo este tiempo han venido corcoveando. Decíamos que al formato cambiario en el cual venía el Banco Central en junio, julio y agosto iba se va a ser complicado llegar, por el exiguo nivel de reservas y que por la parte fiscal la cantidad de pesos que están por venir iban a presionar a la brecha, todo eso es previo a noviembre”.

Para Melconian, “el mercado cambiario como está es insostenible de acá a noviembre”. El economista aseguró que “los valores de importaciones de junio, julio y agosto, con la exportación programada, y aún con supercepo, más la presión que hay en los mercados paralelos del dólar, son insostenibles de acá a noviembre. Son irrepetibles los últimos 10 días. Si no, van a tener que hacer algo para llegar”.

El analista cree que con este nivel de pérdida de reservas, por las ventas del Banco Central, no se llega al 14 de noviembre. “Es insostenible, pasarán a reservas negativas”, afirmó.

Melconian explicó que Argentina no tiene otro ingreso de dólares que no sea la exportación. “El 2020 el sector externo duró con las reservas que había dejado Macri, unos US$ 10.000 millones de reservas líquidas. Y el 2021 con la suba de la santa soja y los DEG del FMI que vinieron de regalo y eso hace llegar (a las elecciones de manera) muy exigua”.

Argentina desde hace años no logra reconstituir reservas genuinas, en el único período en que logró reconstituirlas equivocadamente fue en el comienzo de Macri, porque fue contra endeudamiento externo, una grave equivocación de aquel BCRA“, admitió el ex presidente del Banco Nación durante los primeros meses de la gestión de Cambiemos.

El economista advirtió “miren que no viene Mandrake el dia después“, con relación al nombramiento de un supuesto reemplazo en lugar del ministro Martín Guzmán que pueda encaminar la economía.

“Hay una canchereada en danza, típico de los momentos electorales, en donde se atrasó el tipo de cambio contra la inflación. Cien pesos hoy no es un dólar regalado para ir a comprarse corbatas Hermès a Champs-Élysées pero si la inflación es 3%, 4% por mes y devaluás a 1%, lo único que generás es que los importadores acumulen, los exportadores reculen y la gente se haga la expectativa de que tenés que hacer un salto devaluatorio el día después“, enumeró.

“Pero como prima la política, viene la canchereada de que vamos a devaluar poco así tiramos la primera piedra para desacelerar la inflación y entre que tirás plata y atrasás el tipo de cambio generamos tres o cuatro meses de sensación de bienestar“. Para Melconian, esta política de poner plata en los bolsillos antes de las elecciones es “muy infantil, muy de la historia argentina. No hay nada imprevisto en lo que está ocurriendo”.

También destacó que la venta de dólares del Central de los últimos 10 días no se debió a las elecciones en particular. “Los últimos 10 días los generó la macroeconomía que está vigente, a lo que hay que sumarle lo que venga el 14 de noviembre”.

El ex funcionario describió la política económica actual como “sin ton ni son, inconsistente, en la vereda de enfrente de estabilizar y tranquilizar y con la fantasía de que se va a potenciar la caída de la tasa de inflación y se va a prolongar la reactivación económica. Eso no va a ocurrir“.

Para él, “todo esto es un mensaje electoral, con instrumentos electorales tristes de la historia argentina, como atrasar el tipo de cambio, generar la sensación de bienestar, continuar con la profundización de trabas a los precios, tirar un manguito. Generando la sensación de que pongo la luz de giro a la izquierda pero luego voy a la derecha, porque después de la elección viene Mandrake y nos acercamos a Estados Unidos, y aparecen los que hablan en inglés de nuevo”.

Hacia adelante, alertó por los dos meses que faltan hasta las elecciones del 14 de noviembre. Y, después de las elecciones no ve un cambio radical en la economía.

“Aunque haya acuerdo político, en algún momento tenés que ceñirte a un programa macroeconómico. Cuando venga Mandrake y quiera armar un programa macroeconómico para decir yo soy Mandrake, no soy Guzmán y tenga que presentarlo en la política argentina, va a hacer algo para salir del paso. ¿Va a subir las reservas por magia, eliminar a las Leliq o subir tarifas, va a generar la salida del atraso cambiario por magia, cortar el déficit por magia?”, se preguntó.

“Va a armar una pegatina sin reforma estructural y será el acontecimiento de llamar a que se junten las fuerzas políticas y que firmen. Al Fondo lo único que le interesa es que esto (el acuerdo) vaya al Congreso para sacarle el gancho a alguien”.

Para hacer cambios de fondo, cree que Argentina va a requerir otro liderazgo politico, “que hay que ver si la urna lo encuentra”. “Hace falta una cosa seria, pero eso no se hace en medio de un mandato. Argentina va a requerir un cambio de régimen”, pronosticó.

NE